Así, un día de manera sorpresiva da por terminada la sesión y se levanta, dejando a los regidores del XXI Ayuntamiento con un palmo de narices.
Al otro los cita a “reanudar el diálogo” y tras 18 minutos de reunión, incluyendo 12 minutos de silencios, miradas y susurros, igual se levanta y prácticamente con su mirada los invita a retirarse de la sala de juntas.
En otro intento, el más reciente que tuvo lugar el pasado viernes a las 19:00 horas, el Presidente Municipal de la capital de Baja California, argumenta una gastroenteritis para nuevamente dejar plantados a los regidores, a varios de sus directores de área y al menos un par de grupos inconformes que desean diálogo y respuestas con la autoridad.
Pero más que ganar tiempo para minar la seguridad de sus adversarios para debilitar la unidad y facilitar la negociación, como lo propuso en la reunión privada del pasado martes al invitarlos a platicar uno por uno, Jaime Díaz Ochoa ha logrado debilitar más la confianza en que el actual conflicto que vive el Ayuntamiento local se resuelva en el corto plazo.
Y es que durante este lapso de desencuentros que arrancó con el inicio del mes y el llamado “Viernes negro”, del lado municipal no sólo no ha habido un real interés por reanudar el diálogo para superar diferencias sino que se lanzó una campaña de descrédito para minar la credibilidad y honorabilidad del grupo de 14 regidores que se atrevieron a retar la autocracia presidencial.
Burdos y torpes en el manejo de medios, son tan evidentes que van dejando huellas por todos y cada uno de los espacios mediáticos en los que les interesa colocar sus ataques de desprestigio en contra de los regidores y los síndicos del Ayuntamiento de Mexicali.
La “filtración” de un documento “confidencial” conocido por al menos 25 personas y que al final de cuentas sólo es la confirmación de una prestación económica que desde hace muchos años se ofrece a los regidores para ayuda social, sólo pudo venir de presidencia, oficialía mayor e incluso, habrá que agregar, algún regidor que sin ser panista es afín al Alcalde Díaz Ochoa.
Han venido luego comentarios negativos y descalificaciones personales y en las redes sociales los trolles municipales han incrementado su actividad en contra, principalmente, de los síndicos social y municipal, así como de la regidora Alicia Martínez, del PRI, y ex dirigente del sindicato de burócratas municipales.
Exactamente han transcurrido, con el de hoy, 11 días de aquél viernes en el que los demonios se desataron en el XXY Ayuntamiento de Mexicali tras la iracunda reacción del alcalde, su secretaria particular Sonia Carrillo y la oficial mayor Maribel Osuna Avilés.
Han sido desde entonces a la fecha, “Díaz de furia” que han generado no sólo un distanciamiento mayor entre el alcalde y lo regidores integrantes del G 14, sino un negativo mensaje hacia la sociedad mexicalense que observa conforme avanzan los días, cómo al Presidente Municipal le gana la víscera sobre la razón.
Si Jaime pensó que, como en el pasado, el tiempo le sería favorable, los errores que está cometiendo ante la evidencia de las filtraciones y ataques personales por parte de su equipo, se le están revirtiendo y amenazan con volverse un boomerang para su gobierno.
Si bien no son unas “lumbreras” políticas, los regidores del XXI Ayuntamiento integrantes del G 14 conocen las debilidades del Alcalde y de sus dos principales colaboradoras a quienes han comenzado a exhibir que no son tan puros ni transparentes como presumen.
Del primero destacan la presencia del hermano incómodo, Javier Díaz Ochoa, convertido en el verdadero titular de la Dirección de Seguridad Pública Municipal donde tiene comal y metate sobre el propio director Alejandro Monreal.
De Sonia Carrillo revelan que hace alrededor de un mes logró incrustar a su hijo en la nómina municipal, en tanto que de la Oficial Mayor ha trascendido, aunque no se ha comprobado, el pago por asesorías y servicios especiales a su esposo.
Inicia hoy una semana más que se antoja pudiera ser de definiciones para el futuro de la ciudad y las ambiciones políticas del alcalde quien por cierto, esta semana que pasó recibió la visita en sus oficinas de dos de sus principales rivales internos: El secretario general de Gobierno, Francisco Rueda Gómez y el Secretario de Salud, Dr. Sergio Tolento.
No es común que dos funcionarios estatales, so pretexto de una campaña sanitaria, visiten a un Presidente Municipal que no se encuentra precisamente entre sus afectos y que vive en cambio, una de las peores crisis de gobernabilidad de las que se tenga memoria en la capital del Estado.
El XXI Ayuntamiento de Mexicali inicia este lunes su semana 36 en medio de la discordia, descalificaciones, revelaciones, filtraciones y el regreso a sus funciones de los empleados de Cabildo afectados por la revancha de la llamada triada municipal que obtuvieron la suspensión provisional de un juez federal.
Vamos a ver qué sigue de esta que parece ser una versión adaptada de aquélla gran película protagonizada por Michael Douglas, sobre todo cuando ya el sector empresarial comienza a ver con preocupación señales de autoritarismo que sólo alientan el encono y el enfrentamiento.
Fuente: Fernando Ruiz del Castillo
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